Padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos y organizaciones sociales y del magisterio iniciaron una jornada de lucha en protesta porque el Gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador ha paralizado las investigaciones del caso para proteger al Ejército y a funcionarios de la extinta Procuraduría General de la República (PGR).
“Desde el 2018 a la fecha se han realizando investigaciones pero de manera parcial y hoy podemos decir que hay un estancamiento en ellas que impide conocer lo sucedido”, aseguró Hilda Leguideño Vargas, madre del estudiante desaparecido Jorge Antonio Tizapa.
En un mitin en la Alameda Granados Maldonado, ubicada casi en el centro de esta ciudad, la madre del normalista acusó que el Gobierno federal se ha empeñado en proteger a los elementos del 27 Batallón de Infantería de Iguala.
“Las nuevas indagatorias establecen que las fuerzas armadas están implicadas en distintos niveles de la desaparición de los 43 ya que (el Ejército) realizó un monitoreo desde su salida de la normal de Ayotzinapa, su llegada a Iguala, los momentos de la agresión que sufrían los jóvenes y su desaparición”, sostuvo.
La mujer dijo que el 26 de septiembre de 2014, las Fuerzas Armadas patrullaron las calles de Iguala y presenciaron la agresión a los jóvenes, hicieron contacto con algunos de ellos e inspeccionaron lugares como los separos de la Policía Municipal donde probablemente estaban detenidos algunos estudiantes.
“Además (el Ejército) mantenía un vínculo con el grupo delictivo Guerreros Unidos y algunos mandos del 27 Batallón estaban en la nómina del grupo delictivo”, aseguró.
Hay un testigo protegido, añadió Leguideño, que asegura que 25 normalistas fueron ingresados al 27 Batallón de Infantería la noche del 26 de septiembre.
“Fueron interrogados (los estudiantes) y algunos asesinados y posteriormente entregados a un grupo delictivo que privó de la vida a todos los estudiantes en cautiverio”, expresó.
El Ejército, expuso, posee toda la información y los datos de prueba que permitirían esclarecer los hechos pero se ha negado a proporcionarla pese a que ha sido requerida por las autoridades.
La madre denunció que tampoco las autoridades han investigado y corroborado la responsabilidad de los elementos del Ejército pertenecientes al 27 Batallón de Infantería de Iguala pese al señalamiento directo de testigos.
El propio Presidente Andrés Manuel López Obrador, aseveró, se ha negado a dar órdenes para que el Ejército entregue la información necesaria.
“Definitivamente los hilos de la investigación que nos puede conducir al conocimiento de la verdad y de los responsables se encuentran en los archivos del Ejército Mexicano”.
Los padres de los 43, maestros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación del Estado de Guerrero (Ceteg), estudiantes de las 16 normales rurales del país, colectivos de familiares de otros desaparecidos y del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras a la presa la Parota (Cecop) iniciaron la jornada de lucha 26 de Septiembre no se Olvida.
Los manifestantes arribaron a Chilpancingo a bordo de 20 autobuses e iniciaron una marcha de la estatua Nicolás Bravo a la Alameda Granados Maldonado.
Las actividades de los padres de los 43 y organizaciones sociales incluyen marchas en Acapulco, Ciudad de México y un plantón en la Autopista del Sol, a la altura de Chilpancingo.
Durante el mitin, Melitón Ortega, vocero de los padres de los 43, condenó que el Gobierno de López Obrador ni siquiera ha podido extraditar a Tomás Zerón, ex jefe de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) que está refugiado en Israel.
A Zerón se le señala de haber presenciado y tolerado la tortura de quienes fueron detenidos por la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
Jesús Guerrero | Agencia Reforma
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