Ya comenzaron las lluvias en diferentes regiones de Hidalgo, donde predominan distintas demarcaciones boscosas que se convierten en un territorio ideal para el brote de hongos con los que se preparan deliciosos platillos de la gastronomía local.
Es así como las cocinas de humo se llenan de aromas especiales en lugares como Acaxochitlán, Epazoyucan, Omitlán y Mineral del Chico, entre otros.
Un caso especial es Acaxochitlán, pues tiene una tradición de colecta de hongos por medio de sus nanacateras, quienes, a través del conocimiento transmitido de generación en generación, se han dedicado no solo a visitar, sino a proteger los bosques.
Es así como han aprendido a distinguir los hongos comestibles de los alucinógenos o venenosos, para llevar a la cocina aquellos que son ideales para preparar platillos que van desde quesadillas hasta caldos y otros más elaborados, como acompañar carne de cerdo con una salsa de adobo combinada con xoconostle.
Entre los hongos comestibles están los boletus, pancitas, yemas y orejas, entre otros.
Lo mismo ocurre en lugares como Epazoyucan y Mineral del Chico, donde se aprovecha el temporal para hacer la búsqueda de las especies que se encuentran a ras de piso y muchas veces parecen estar ocultas debajo de las hojas. Ahí, tanto en cocinas de humo como en restaurantes, se aprovechan para preparar deliciosas sopas, hongos rellenos, tamales, tacos de hongos y diversos guisos sazonados con cebolla, chile y epazote, en algunos casos.
Actualmente, diversas operadoras turísticas están preparando eventos especiales para conocer los diferentes tipos de hongos, así como la forma de recolección y su preparación para degustar junto con la mejor compañía.
DATO:
Entre los hongos comestibles están los boletus, pancitas, yemas y orejas, entre otros
Sara Elizondo | Pachuca