Durante los meses de mayo y junio, los trabajadores en México verán un aumento en sus ingresos gracias al reparto de utilidades, un beneficio estipulado en la Ley Federal del Trabajo (LFT). Esta legislación garantiza a los empleados un porcentaje de las ganancias netas obtenidas por las empresas.

La Comisión Nacional para la Participación de los Trabajadores en las Utilidades de las Empresas es la encargada de determinar el monto específico que corresponde a cada trabajador, establecido en el 10 por ciento de las utilidades netas de la compañía. Este cálculo se basa únicamente en el salario por cuota diaria de los empleados y excluye otros conceptos adicionales como horas extras o bonificaciones.

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El reparto debe realizarse en moneda de curso legal, conforme al Artículo 101 de la Ley Federal del Trabajo, con lo que se prohíbe el pago en mercancías, vales u otros sustitutos del dinero.

Otro dato relevante es el relacionado con las fechas límite para su distribución, que son el 30 de mayo para entidades de carácter moral y el 29 de junio para empleados de personas físicas.

El reparto de utilidades no solo fomenta la participación de los trabajadores en el crecimiento económico de las empresas, sino que también refleja su salud financiera, ya que solo aquellas con ganancias netas están obligadas a distribuir entre su personal.