Claudia Sheinbaum Pardo, la próxima presidenta de México, aún no ha definido dónde vivirá una vez que asuma el cargo el próximo 1 de octubre.
Tras su victoria en las elecciones del pasado 2 de junio, Claudia Sheinbaum Pardo, la próxima presidenta de México, aún no ha definido dónde vivirá una vez que asuma el cargo el próximo 1 de octubre.
En contraste con su predecesor, Andrés Manuel López Obrador, quien inicialmente residió en su domicilio antes de mudarse a Palacio Nacional, Sheinbaum ha mantenido el suspenso sobre su decisión. López Obrador, recordado por transformar la residencia oficial de Los Pinos en un centro cultural, se trasladó junto con su familia a un departamento de 300 metros cuadrados en Palacio Nacional, reformado durante el mandato de Felipe Calderón.
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En una entrevista realizada en marzo por los periodistas David Aponte y Carlos Benavides para El Universal, Sheinbaum admitió no haber tomado una decisión definitiva al respecto. “Todavía no lo decido”, expresó. Reconociendo las ventajas y desventajas de vivir en su lugar de trabajo, explicó: “Si vives en tu casa siempre es incómodo para los vecinos. Yo vivo en un departamento, donde en el piso hay cuatro departamentos, entonces no he decidido, pero lo hablaremos en su momento”.
La posibilidad de mudarse a Palacio Nacional tampoco ha sido descartada. En una entrevista con Expansión en septiembre de 2023, Sheinbaum dejó abierta esta opción, lo que ha alimentado la especulación sobre sus futuros planes de residencia.
Actualmente, la presidenta electa vive con su esposo José María Tarriba en un departamento rentado en la colonia Toriello Guerra, ubicada en la alcaldía Tlalpan de la Ciudad de México. La incertidumbre sobre su futura residencia refleja una vez más su estilo considerado y reflexivo, priorizando tanto su comodidad personal como las implicaciones logísticas de su decisión.