Una mujer fue a comprar comida para sus bebés y cuando regresó a su casa la encontró en llamas; aunque los vecinos apagaron el fuego, sus pequeños murieron carbonizados.
Cerca de las 09:30 horas Jazmín, de 21 años, dejó a sus bebés dormidos en el cuarto en construcción donde vive y que está ubicado sobre Jacarandas y Flor de Azucena, en la Colonia Lomas de la Primavera, en Zapopan.
Momentos después, un familiar de la joven madre, quien vive en la planta baja, notó que salía humo y fuego del cuarto del segundo nivel, por lo que le avisó y comenzó a pedir auxilio con sus vecinos.
De inmediato varios residentes de la zona y trabajadores de negocios intentaron ayudar, pues sabían que había dos bebés en esa finca.
Unos llenaron botes con agua para apagar las llamas y otros intentaron llamar a los números de emergencias para pedir la intervención de los bomberos.
En las calles de tierra se vivía el desasosiego y el paso del tiempo se hacia cada vez más lento al no poder apagar el fuego y ver que no llegaban los rescatistas.
Leonardo, un joven carnicero de 27 años, vio que con dificultad los adultos mayores que viven debajo del cuarto que era consumido subían la escalera para combatir el fuego, por lo que no lo pensó dos veces para luchar contra éste.
“Estaba un señor a media escalera, un viejito, estaban dos arriba, ya llegué yo y les ayudé a cargar más botes.
“Vine por el extinguidor y fui a ayudarles, por instinto, pues… pero no se pudo hacer nada”, cuenta el muchacho.
El joven, quien escupió negro tras inhalar humo y se quemó el cabello y la barba, recuerda que tras la lucha lograron sofocar las llamas para que no se propagara a la vivienda de abajo, pero les partió el alma ver a los bebés sin vida.
“Cuando es así no le hace, no piensas en ti, más bien, pues son niños, son inocentes, ellos van empezando a vivir y uno tiene que ayudarles a que vivan un poquito más, no se pudo, pues ya Dios tenga misericordia de ellos.
“En el momento tenía la impotencia, ahorita estoy como tratando de tener ese discernimiento de que se hizo lo que se pudo y ya lo demás es cuestión de Dios”, reflexiona horas después mientras corta carne para su clientela.
Los vecinos coincidieron que al menos cinco minutos después de que acabaron con el incendio llegaron los bomberos de Zapopan, sólo para confirmar que los dos bebés habían muerto.
Las pequeñas víctimas fueron identificadas como Karla, de 5 meses, y Mauricio, de 2 años con 9 meses de vida; ambos cuerpos quedaron sobre la cama.
La zona fue acordonada para que los peritos procesaran la escena y se investigara la causa del incendio, la cual, aparentemente, habría sido por un corto circuito en un foco.
Por su parte, Miguel Macías, supervisor operativo de la Unidad Municipal de Protección Civil y Bomberos Zapopan (UMPCyBZ) recomendó a la ciudadanía que antes de salir se deben revisar las instalaciones eléctricas, nunca se deben dejar solos a los menores y, si es necesario salir, dejarlos encargados o llevarlos consigo.
Además, el uniformado detalló que en esta temporada se debe tener especial cuidado, ya que los materiales se calientan y eso facilita la propagación del fuego cuando hay un incendio.
Luis Enrique Aguirre Samayoa | Agencia Reforma
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