A Yemeni boy holds a Palestinian national flag during a demonstration held in Yemen’s third city Taez to denounce the continuing Israeli air strikes on the Gaza Strip on May 19, 2021. – Prime Minister Benjamin Netanyahu said that Israel’s aerial bombing campaign on the Gaza Strip was aimed at deterring Hamas, but did not rule out conquering the enclave’s Islamist rulers. (Photo by AHMAD AL-BASHA / AFP)
Hamás liberó este domingo a otros 17 rehenes, 14 de ellos israelíes, retenidos en la Franja de Gaza desde hace siete semanas, en el tercer día de una tregua entre el movimiento islamista e Israel, que dijo que excarceló 39 palestinos a cambio.
Con esta liberación, la tercera desde que entró en vigor el alto el fuego el viernes, son ya 58 el número de rehenes que han recobrado su libertad.
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Los rehenes liberados este domingo son 13 mujeres y menores israelíes, un hombre con doble nacionalidad ruso-israelí y tres tailandeses, según fuentes oficiales israelíes.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció que una de las menores israelíes liberadas es una niña que también tiene la nacionalidad estadounidense.
Otra rehén liberada, Elma Avraham, israelí de 84 años, fue trasladada en helicóptero a un hospital del sur de Israel donde se encuentra en estado grave, declaró Shlomi Codish, director del hospital Soroka, que precisó que “su vida corre peligro”.
Hamás anunció poco antes que liberó, al margen del acuerdo, a una persona con nacionalidad rusa “en respuesta a los esfuerzos del presidente ruso, Vladimir Putin”, y su “apoyo a la causa palestina”.
Israel informó que excarceló a 39 palestinos prisioneros, como parte de la negociación. En total, son ya 117 presos palestinos los que han sido liberados de las cárceles israelíes desde el inicio de la tregua el viernes.
Alrededor de 7.000 palestinos se encuentras encarcelados en prisiones israelíes, según el Club de Prisioneros, una oenegé palestina en defensa de los detenidos.
Vehículos del Comité Internacional de la Cruz Roja condujeron a Ramala y Beitunia, en Cisjordania Ocupada, a los presos palestinos liberados, que fueron recibidos por una multitud con banderas palestinas, de Hamás y de otras facciones palestinas. Otros se reunieron con sus familias en Jerusalén este.
El pacto anunciado el miércoles gracias a una mediación de Catar, Estados Unidos y Egipto, prevé la liberación de 50 rehenes de Hamás a cambio de la excarcelación de 150 palestinos presos en Israel.
El acuerdo también contempla una tregua de cuatro días, que brinda un respiro a los más de dos millones de habitantes de la Franja de Gaza, bombardeada y asediada por Israel en respuesta al ataque de Hamás del 7 de octubre.
Los milicianos islamistas mataron ese día a 1.200 personas en Israel, en su mayoría civiles, y secuestraron a 240 más, según las autoridades del país.
Israel prometió “aniquilar” a Hamás tras el ataque y lanzó una ofensiva en la Franja de Gaza.
Hamás, catalogado como organización terrorista por Israel, Estados Unidos y la Unión Europea, afirma que la ofensiva israelí ya ha dejado cerca de 15.000 muertos en el territorio, que gobierna desde 2007.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, visitó este domingo Gaza por primera vez desde el inicio de la guerra. La ofensiva de Israel continuará “hasta el final, hasta la victoria”, afirmó.
“Tenemos tres objetivos en esta guerra: eliminar a Hamás, traer de vuelta a todos nuestros secuestrados y garantizar que Gaza no se convierta nuevamente en una amenaza para Israel”, declaró, según un video publicado por su gabinete.
¿Prolongación de la tregua?
El dirigente israelí anunció que había conversado con el presidente estadounidense, Joe Biden, , quien espera que la tregua de cuatro días se prolongue.
Una fuente cercana a Hamás afirmó a la AFP que el grupo está dispuesto a extender la tregua de “dos a cuatro” días.
De momento, el alto el fuego ha permitido la entrada de centenares de camiones con ayuda humanitaria en Gaza, que desde el 9 de octubre está bajo asedio total de Israel, sin electricidad, ni agua y sin medicamentos.
Si bien la tregua ofrece un respiro a los gazatíes, la situación humanitaria en el territorio es “peligrosa” y las necesidades “sin precedentes”, dijo el domingo la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos.
La ONU informó que 248 camiones cargados con ayuda humanitaria entraron desde el viernes a la Franja, donde 1,7 millones de personas se vieron obligadas a abandonar sus hogares por el conflicto.
El ejército de Israel lanzó octavillas a la población con la orden de evacuar el norte de la Franja, donde se sitúa la Ciudad de Gaza, y donde según el ejército israelí se sitúa el centro de mando de Hamás.
También advirtió a los gazatíes que quieren volver a sus hogares durante la tregua que los combates van a continuar.
“No tenemos armas. Somos civiles”, afirmó Mahmud Masood entre los escombros de Jabaliya, en el norte del territorio.
Según un periodista de la AFP en Gaza, el ejército israelí envió el domingo mensajes de texto a los habitantes de Jan Yunis, en el sur. “Sabemos que hay rehenes en Jan Yunis. Sepan que el ejército neutralizará a cualquiera que haya secuestrado rehenes”, dice la advertencia.
Fragilidad del alto al fuego
El brazo armado de Hamás confirmó el domingo la muerte en la ofensiva israelí del comandante de su brigada del norte de Gaza, Ahmed al Ghandour, y de otros cuatro altos cargos.
El movimiento islamista liberó el sábado a un segundo grupo de rehenes, compuesto por 17 personas, a cambio de 39 presos palestinos.
Las liberaciones se retrasaron sin embargo varias horas después de que Hamás acusara a Israel de no respetar los términos del acuerdo, una señal que muestra la fragilidad del alto el fuego.
En Jerusalén Este, ocupada y anexionada por Israel, las celebraciones fueron discretas. Miembros de las fuerzas de seguridad israelíes, armados y con casco, rodearon la vivienda de Israa Jaabis, de 39 años, la presa palestina más conocida de la lista.
Jaabis fue condenada a 11 años de prisión por detonar un recipiente con gas durante un control de tránsito en 2015, hiriendo a un agente de policía y provocándose graves quemaduras.
