El entrenador Urs Fischer no dirige hoy al Unión Berlín en el banquillo, en el duelo ante el Bayern de Múnich, debido a que rompió la cuarentena por el fallecimiento de un familiar.

Fischer abandonó el aislamiento para reunirse con su familia tras la muerte de su suegro. El técnico suizo regresó anoche, pero no se unió al equipo debido a las nuevas normas previstas en el protocolo para la reanudación de la liga alemana.

“Todo nuestro apoyo a la familia Fischer en estos momentos difíciles”, dijo el presidente del Unión Berlín, Dirk Zingler.

En lugar de Urs Fischer, es su asistente, Markus Hoffmann, el encargado de asumir las funciones de dirigir al equipo contra el gigante bávaro.

Fischer no se unirá al grupo del Unión Berlín hasta que supere con resultado negativo dos tests de Covid-19.

En el momento de la interrupción de la Bundesliga en marzo, el Unión Berlín era undécimo en la tabla. El Bayern, por su parte, era líder, con cuatro puntos de ventaja sobre el segundo, el Borussia Dortmund.

La Bundesliga es la primera gran liga europea que se reanuda desde que el nuevo coronavirus detuviera en marzo el
deporte mundial.

Urs Fischer no será el único entrenador que se pierda la jornada de este fin de semana.

El jueves se conoció que Heiko Herrlich, técnico del Augsburgo, se ausentaría ayer en el banquillo ante el Wolfsburgo debido a que también rompió la cuarentena, en su caso por ir a un supermercado para comprar pasta dental y una crema dermatológica.

AFP I Berlín