Ser la esposa del futuro rey de Inglaterra no exime a Catalina Middleton de experimentar sentimientos de culpa a consecuencia de tener que dejar a sus hijos para cumplir con obligaciones laborales.

“Cualquier mamá que te diga que no (siente culpa), en realidad está mintiendo”, aseguró la duquesa de Cambridge durante su participación en el podcast Happy mum, Happy baby.

El programa fue grabado a finales de enero, y coincidió con una visita que Catalina realizó a una estancia infantil.

“Incluso esta mañana, cuando venía para acá, Jorge y Carlota me decían: ‘Mami, ¿cómo es posible que no vas a ir a dejarnos a la escuela?”, contó la duquesa en referencia a sus hijos mayores.

“Es un desafío constante, lo oyes a menudo de muchas mamás, incluso aquellas que no tienen un trabajo fuera de casa y no necesitan dividirse entre su vida laboral y familiar”.

La conductora, Giovanna Fletcher, le preguntó a la esposa del príncipe Guillermo sobre la primera vez que sostuvo a Jorge, su primogénito, en brazos.

“Asombroso, asombroso. Como ya lo he dicho, es extraordinario. ¿Cómo puede hacer eso el cuerpo humano? Y también me sentí aliviada de que fuera un niño feliz y sano. Aparte, ver la cara de tu esposo y descubrir esa felicidad pura es algo muy especial.

“No voy a decir que Guillermo estuvo en el parto diciéndome palabras de aliento. ¡Definitivamente no lo hizo! Ni siquiera se lo pedí, era algo que quería hacer sola”.

La duquesa también se refirió a las molestias que experimentó en sus tres embarazos, a causa de náuseas y vómitos excesivos.

“No soy la más feliz de las embarazadas. He tenido náuseas severas en cada embarazo. Muchas mujeres la pasan peor, pero sí fue todo un reto. Y no solo para mí, sino para todos a mi alrededor.

“Guillermo sentía que no podía ayudarme. Es difícil para todos ver que no pueden hacer nada al respecto. Me sentía fatal, estaba muy mal”.

Catalina también se refirió al momento en que ella y su esposo presentaron al pequeño Jorge a la salida del hospital, y admitió que se sintió aterrada y deseaba marcharse cuanto antes a su casa.

En cuanto al modo en que le gustaría que la recordaran sus hijos, Jorge, Carlota y Luis, la duquesa se mostró un poco dubitativa.

“Quizá me gustaría que me recordaran tratando de resolver la tarea de matemáticas o de deletreo. O cuando intentamos asar salchichas en una fogata pero no nos salió a causa de la humedad.

“Eso es lo que quiero que recuerden, y también cosas que hicimos como familia, como ir a la playa, llenar nuestras botas de agua y empaparnos. No quiero que se acuerden de una casa llena de estrés donde intentamos hacer todo perfecto”.

Staff I Agencia Reforma