La familia real británica le costó al contribuyente 121 millones de dólares en 2020, con 60 por ciento de esos recursos para cubrir los gastos y tareas de personal de la Reina Isabel II (tiene 500 trabajadores a su cargo solo en Londres), de acuerdo con las cuentas oficiales.
Pero las cuentas desvelan más detalles, que han explicado portavoces de palacio y que dejan en entredicho informaciones anteriores, según desmenuza el diario español El País.
Por ejemplo, en el caso de las cuentas de Enrique y Meghan Markle, se pudo corroborar que sí recibieron recursos oficiales hasta el verano del 2020.
En su entrevista con Oprah Winfrey el pasado mes de marzo, la pareja explicó que se les había cortado toda ayuda financiera desde que salieron de la institución, en marzo de 2020. Enrique explicó que había tenido que vivir de la herencia de su madre Diana.
Pero ahora un portavoz de de Clarence House, es decir, de la residencia del Príncipe Carlos, padre de Enrique, contradijo estas declaraciones. Señaló que Carlos les dio a sus dos hijos, Guillermo y Enrique, un total de 6.2 millones de dólares durante el ejercicio 2020/2021.
Staff | Agencia Reforma