El gobierno municipal de Tula exigirá a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) que antes de retirarse de la demarcación repare todos los desperfectos causados a la infraestructura urbana de la ciudad que se han tenido a causa de la ejecución del Plan Hídrico para evitar inundaciones.

Así lo afirmó el alcalde Mario Guzmán Badillo, quien, en entrevista, dijo que la dependencia federal tiene que garantizar esas reparaciones, como ya se estipuló en un convenio, mismo que, reconoció, se ha incumplido en algunos aspectos.

“Ha habido varios incumplimientos de parte de ellos, por lo que sí tendremos que alzar un poco más la voz en busca de que no se eludan los acuerdos que firmamos de manera conjunta”, refirió.

El pronunciamiento del edil sobreviene luego de que la Conagua diera a conocer que la segunda etapa de los trabajos del río Tula se terminarían en mayo, por lo tanto, el presidente municipal reiteró que se insistirá en que se repare la infraestructura que haya sido lesionada.

La dependencia federal arribó a la Capital Tolteca desde el 6 de abril de 2022, y, desde entonces, calles, banquetas, alumbrado público, puentes, bardas y demás infraestructura pública y viviendas han sufrido daños estructurales a consecuencia del paso constante de maquinaria pesada, principalmente en calles de la cabecera municipal y sus colonias próximas, como la 16 de Enero.

Los menoscabos causados no solo han sido materiales, puesto que a lo largo del proceso de la obra también ha habido dos muertes como consecuencia de las labores, lo mismo que al menos una decena de lesionados.

Los dos casos más recientes se suscitaron el 31 de diciembre de 2023, cuando un trabajador de la empresa Control de Erosión perdió la vida tras el deslave de un talud que hubo en el Callejón de la Cruz, en la Unidad Habitacional Pemex (UHP), lo que implicó también el cierre de la arteria; mientras que el otro fue el atropellamiento de un adulto mayor, el 11 de enero, en la colonia 16 de Enero.