Alex Sandro de Souza Mota, un preso de 30 años, quien fue condenado en Brasil por violar a su hijastra, fue encontrado sin vida con el corazón extirpado y su pene en la boca.
El sujeto, mismo que cumplía su sentencia de 23 años, habría sido asesinado por un sujeto con el que compartía celda.
El delegado Izaías Cordeiro de Lima, responsable de la investigación, señaló que el cadáver presentaba cortes en el cuello y otras heridas en su cuerpo, mientras que la Policía Civil reveló que los agentes de la cárcel acudieron al lugar del crimen tras los gritos de tres detenidos que también estaban en la celda.
“En la celda de PECO, uno de los detenidos asestó el primer golpe en el cuello a la víctima y acabó provocando una hemorragia y se dio cuenta de que posiblemente lo había matado”, declaró Cordeiro de Lima a la prensa local.
El informe de la penitenciaria advierte que la escena del crimen fue limpiada por el o los asesinos.
El cuerpo de Alex Sandro de Souza Mota fue enviado a una autopsia.
Redacción web
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