Con los primeros médicos cubanos que llegaron a México presentes, el Presidente Andrés Manuel López Obrador repitió su promesa de mejorar el sistema de salud mexicano y defendió su ideal, dijo, de contratar a los especialistas de la isla.
“No es responsabilidad ni del doctor Navarro (Gobernador de Nayarit), ni del doctor Alcocer ni de Zoé, fue una instrucción que yo di, sabiendo cómo iban a responder nuestros adversarios, los conservadores. Yo tomé la decisión de que contrataran médicos especialistas del extranjero y van a venir médicos de Cuba”, dijo en su discurso en Hospital del IMSS de Rosamorada, al norte de Tepic.
Sentados hasta adelante con batas blancas, un grupo de ocho cubanos hizo el movimiento de levantarse, como si fueran a ser presentados, pero López Obrador no se refirió a ellos, sino que siguió adelante, algo molesto por una protesta de unos 15 trabajadores eventuales de la salud mexicanos que acusaba a gritos sus despidos injustificados.
El Presidente acusó que el “modelo neoliberal” les heredó una falta de especialistas y 90 mil empleados eventuales, 800 tan sólo en Nayarit, de los que ya faltan menos de 100 por basificar.
“Los que fueron despedidos injustificadamente, van a ser reinstalados, restablecidos, nada más les quiero decir una cosa: se tiene que revisar qué hacen, porque no queremos gente que cobre sin trabajar”, advirtió.
Jorge Ricardo Nicolás I Agencia Reforma
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