El bebé Tadeo permaneció toda una noche en el penal de San Miguel, en la Capital de Puebla, antes de depositarlo en un contenedor de basura, informó el Fiscal estatal, Gilberto Higuera.

En su informe de labores ante el Congreso estatal, explicó que una mujer, ya detenida, fue quien le llevó el cuerpo a un interno que realizaba actividades delictivas al exterior del centro penitenciario.

“Esa persona del sexo femenino logró introducir ese cuerpo con la complicidad de custodios. Logramos establecer cómo después de tenerlo ahí una noche, al día siguiente lo depositaron en el contenedor. El hecho está esclarecido”, dijo.

Higuera indicó que se ejerció acción penal en contra del personal del penal, ya que tenía bajo su cargo la supervisión y coordinación de dos custodios involucrados en el caso.

“Se hizo esa acción para desestabilizar el funcionamiento del centro penitenciario puesto que esa persona que solicitó la introducción (del cuerpo) estaba disputando el liderazgo con otros internos de la actividad delictiva. Vamos a seguir investigando ese hecho, todavía no lo hemos terminado”, detalló.

El funcionario mencionó que, a partir del hallazgo en el contenedor, investigaron los elementos hallados en el cuerpo del bebé.

“Tenía un documento en su cuerpo que indicaba que había sido atendido en un hospital. Buscamos en hospitales del Estado, buscamos en oficinas del Registro Civil, en lugares donde se habían asentado defunciones”, explicó.

El Fiscal informó que en esa búsqueda se comunicaron personas de la Ciudad de México que querían saber si el cuerpo era suyo.

“Los entrevisté personalmente y se les hicieron pruebas genéticas. El cuerpo era el hijo de esta familia, había sido inhumado en la Ciudad de México”, añadió.

Araceli Patricia Aguilar Moreno
Agencia Reforma

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