Los Tigres salieron vivos de la guarida de la Fiera, aunque solo les alcanzó para empatar, y ya suman cinco juegos consecutivos sin ganar en el Torneo Guardianes 2020.
Con el regreso de Nahuel Guzmán en la portería y Leo Fernández como conductor del equipo en la última media hora de juego, los auriazules mostraron mejoría y rescataron un empate 1-1 ante el León.

La cita lucía complicada para el equipo de Ricardo Ferretti que parecía llegar como víctima, porque la Fiera había vencido a los últimos ocho rivales que se metieron a su casa.

Sin embargo, resultó ser un duelo de porteros en el que el León se topó con la calidad de Nahuel y, sobre el final, fue el arquero esmeralda Rodolfo Cota el que impidió que los Tigres se llevaran el triunfo.

La presencia del Patón fue clave desde el arranque del juego, cuando gracias a sus reflejos felinos evitó un gol de Nico Sosa. Después, el argentino tendría hasta cuatro intervenciones providenciales más.

León se adueñó del balón y su gol lo encontró al cierre del primer tiempo en un contrarremate de Fernando Navarro que tomó a contrapié a Nahuel para el 1-0 de la Fiera al minuto 44.

Arrancando la segunda mitad, Gignac tuvo el empate en un mano a mano, pero la elasticidad de Cota le quitó su noveno gol del torneo.

El partido se hizo de ida y vuelta y, de nuevo, porque en poco tiempo Cota salvó a su equipo tras un remate con la cabeza de Julián Quiñones.

Aunque se esperaba que Leo Fernández fuera titular, el uruguayo entró hasta el minuto 60 por Luis Quiñones.

A los 74’, Leo cobró de zurda un tiro de esquina y encontró en el área a Francisco Meza, quien cabeceó para el 1-1.

A esas alturas, Tigres había emparejado el trámite del juego, pero la expulsión de Guido Pizarro al 80’ comprometió  al equipo.

Pese a ello, Tigres estuvieron más cerca de ganar con un tiro de media distancia de Leo y una volea de Gignac que hizo que Cota compartiera el traje de héroe con Nahuel.

Juan Carlos Jiménez
Agencia Reforma