Doctor Muerte expresó su satisfacción por mantener vivo su legado a través de sus hijos y sus nietos.
El mítico gladiador pachuqueño dijo adiós a los cuadriláteros el 15 de diciembre de 2019; sin embargo, compartió que, tras 35 años de carrera, su dinastía se mantendrá viva a través de Súper Rockero y Princesa Amazona, así como el menor de la familia Caballero de Atena.
“Ahorita dejo en este deporte a una mujer y un hombre, también a mis nietos; para mi es una satisfacción verlos, que la semilla siga dando”, comentó.
El radicado en barrio Cubitos afirmó que también quedó con la complacencia de irse con su incógnita a salvo. “Orgullosamente me la llevó intacta (su máscara), ni rota siquiera”.
Tras una larga trayectoria, destacó: “Son los años que me aguantó mi esposa, siempre fue mi doctora, mi enfermera toda la vida (…) Gracias mi virgen de Guadalupe, me protegió los 35 años de luchador”.
Afirmó que el empeño y constante aprendizaje en los entrenamientos fueron la clave para perdurar tanto tiempo, en el que trabajó bajo la instrucción de Leopardo, Titanio e El Intruso Jr., entre muchos otros.
“Cuando empiezas una lucha, no sabes si vas a bajar bien (del ring); si no te preparas, hay lesiones. Mi satisfacción es empezar una leyenda y terminar con ella”, abundó.
Otro consejo que dejó a las nuevas camadas es que alternen el deporte con una profesión u oficio, pues consideró que la lucha libre da mucho, pero también quita todo.
“Yo soy profesionista y me dediqué a este deporte por matar el estrés, por ser el héroe de mi familia, de los niños.
“Yo tenía mi trabajito gracias a Dios, a lo mejor quise ir a Japón, pero mi trabajo era muy importante; ahorita estás bien, pero a los 28 años te lastimas y ya no sirves; entonces, teniendo un trabajito, de ahí te mantienes hasta que uno quiere trabajo”, abundó.
Doctor Muerte recorrió diversas plazas en la entidad como Pachuca, Actopan, Tizayuca y Tulancingo; asimismo, comentó que tuvo fuerte presencia en Veracruz, donde forjó grandes rivalidades.
Alejandro Velázquez I Pachuca
