El ruido de los fuegos artificiales puede desencadenar daños en la salud de perros y gatos como consecuencia del estrés que les genera, indica Alejandro Castillo, médico veterinario zootecnista del Hospital Veterinario de Universidad del Valle de México (UVM).

Irritación severa, problemas con sus jugos gástricos, cuadros de gastritis crónica o colitis, vómito, diarrea, falta de apetito, estados epilépticos, dificultad para respirar, infartos e inclusive la muerte son algunas de las consecuencias que esta práctica tiene en las mascotas, precisa el especialista a través de un boletín de prensa.

Al respecto, Castillo aclara que las consecuencias se tornan más graves si los pacientes tienen predisposición a enfermedades del corazón o a problemas convulsivos.

Además, enfatiza que existen razas con mayor susceptibilidad al ruido, tales como los chihuahua, los yorkshire y los schnauzer.

En el caso de los gatos, agrega, los felinos pueden experimentar problemas de conducta y dermatológicos, ya sea por el exceso de estrés o por el lamido excesivo.

Para lidiar con esto, el especialista recomienda a los tutores:

+ Identificar partes de la casa donde se perciba menos ruido y llevar a sus mascotas ahí.
+ En caso de que el paciente tenga gastritis crónica, administrar con anticipación al evento pirotécnico el tratamiento prescrito por el médico veterinario.
+ Acompañar a la mascota durante el evento.
+ Usar música, premios o la televisión como distractores.
+ Para los gatos, emplear hormonas aromáticas que permiten relajarlos.

Adicional a lo anterior, Castillo indica que ante cualquier síntoma de alteración el propietario debe actuar en forma inmediata y llevar a su mascota con su médico veterinario.

Agencia Reforma

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