Fue gracias a un payaso macabro que su nombre se hizo conocido, pero para Jack Dylan Grazer el gusto por el cine viene de familia.

Jack es sobrino del reconocido productor cinematográfico Brian Grazer (Una mente maravillosa, Splash) y su papá es Gavin Grazer, productor de cintas como Gánster americano y El grinch.

Pero el joven de 15 años ha comenzado a forjar su propia trayectoria con el papel de Eddie Kaspbrak en la adaptación cinematográfica de la novela Eso, de Stephen King.

“Creo que si no fuera actor estaría haciendo algo relacionado con el cine; siempre me he sentido atraído por ese mundo, a lo mejor como productor o director”, comenta el actor en entrevista.

Su desenvolvimiento desde pequeño lo hizo estar como invitado en el programa ARTE (Adderley Repertory Theatre Ensemble) en la Escuela Adderley para las Artes Escénicas, donde actuó en múltiples producciones.

Pero los papeles comerciales y televisivos lo ayudaron a ganar su primer papel principal en la película Scales: Mermaids are real.

“Estoy en noveno grado. Quiero estudiar cine, estoy tomando ahorita una clase y viendo cómo analizar la rotura y disección de las películas”, señala, visiblemente emocionado.

Los superhéroes y el universo de DC han apasionado siempre a Jack; durante su participación en el Horror Fest 2018, se declaró fan de Batman y muy pronto podremos verlo en Shazam!, donde interpretará a Freddy Freeman.

“Es asombroso, siempre me gustó DC, desde chico he sido fan de eso, crecí con La liga de la justicia; es algo irreal e increíble ser parte de eso, ser parte del universo DC”.

Acerca de sus planes, el joven solo piensa en seguir haciendo lo que más disfruta, pero a la décima potencia.

“Espero en cinco años continuar con mi carrera, o quizás algo más grande, como haciendo mis propias películas, dirigirlas, producirlas y escribirlas”.

En cuanto a su vida personal, el californiano se dice “soltero y sin compromisos”.

Javeira López I Agencia Reforma