De acuerdo con el informe individual de la cuenta pública 2020, emitido por la Auditoría Superior del Estado de Hidalgo (ASEH), en Tula, durante ese año, cuando era gobernado por Ismael Gadoth Tapia Benítez (hasta el 4 de septiembre) y Verónica Monroy Elizalde (presidenta del Concejo Interino, del 5 de septiembre al 14 de diciembre), el ente fiscalizador detectó inconsistencias en la comprobación de 461 mil 602.27 pesos.

El reporte indicó que dicho monto deriva de 20 resultados examinados, los cuales generaron ocho recomendaciones y 10 pliegos de observaciones, que representan probables recuperaciones por el monto antes mencionado.

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En ese sentido, la ASEH aclaró en su momento que esta cantidad no necesariamente implican daños o perjuicios a la Hacienda pública o al patrimonio del municipio y estipuló que estarán sujetas a las aclaraciones que se efectúen en los plazos establecidos para ello.

No obstante, también se puntualizó que lo anterior no exime de las responsabilidades a que haya lugar por los actos u omisiones que generaron los resultados de auditoría en términos de las disposiciones legales aplicables.

Por otro lado, el órgano fiscalizador explicó que la auditoría se practicó tomando en cuenta la información proporcionada por el ayuntamiento, de cuya veracidad es responsable, dado que “fue planeada y desarrollada de acuerdo con el objeto y alcance establecidos y se aplicaron los procedimientos y las pruebas selectivas que se estimaron necesarios”.

Con todo ello, la ASEH consideró que, en términos generales, “la alcaldía cumplió con las disposiciones y normativas aplicables respecto de las operaciones examinadas”, excepto por los 20 resultados observados, los cuales se precisaron en los apartados correspondientes del informe.

La institución afirmó que la mayoría de conceptos analizados durante el año fiscalizado en Tula derivan de obra facturada, pagada y no ejecutada, además de que se señaló también que falta documentación justificativa de estas y que “existen conceptos con deficiente calidad o con vicios ocultos o que fueron omitidos”.

Asimismo, la ASEH indicó que “se tuvieron errores y omisiones relacionados con deficiencias en el control interno de actividades de control y de administración de riesgos, falta en la elaboración de finiquitos de contratos de obra o en la entrega-recepción de las mismas”, así también, de documentación justificativa.

Desglose de las observaciones

• El mayor importe observado por la ASEH tras la auditoria a la cuenta pública 2020 fue de 153 mil 524.31 pesos, correspondiente a la obra ejecutada con recursos del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social Municipal y Demarcaciones Territoriales del Distrito Federal (Fismdf) de ese mismo año
• Esta consistió en la pavimentación hidráulica de la calle Tollan, en la comunidad San José, en la que se observó la erogación de conceptos “con deficiente calidad o vicios ocultos”
• La segunda observación más grande fue por 124 mil 877.22 pesos, correspondientes también a una pavimentación de la calle Vicente Guerrero, segunda etapa, en El Llano Segunda Sección
• El tercero fue por 53 mil 340.37 pesos, usados para una red de drenaje en la calle Deportiva, en la localidad Nantzha, en la que se detectó que se pagaron conceptos no realizados
• Existe una cuarta observación por parte de la ASEH, por 39 mil 226.54 pesos, correspondientes a la construcción de tres aulas en el Colegio de Bachilleres del Estado de Hidalgo (Cobaeh), ubicada en San Miguel Vindhó
• El resto de las inconsistencias fueron por 25 mil 322.08, 10 mil 923.10, 13 mil 527.78, 10 mil 535.90 y 25 mil 578.20 pesos

Miguel Ángel Martínez | Tula de Allende