Más de 20 comunidades de Chilcuautla, San Salvador e Ixmiquilpan acusaron que personal de diferentes dependencias del gobierno federal siguen presionándolos para que permitan la construcción de un libramiento carretero que cruzará más de 32 kilómetros de sus tierras.
“El Pueblo Hñähñü reunido en asambleas comunitarias ha hecho valer su derecho a la autodeterminación en repetidas consultas, asambleas y actas, donde se ha manifestado contundentemente hasta el cansancio la negativa en contra del Libramiento Ixmiquilpan”, señalan los delegados a través de un documento.
Explicaron que han expuesto su postura al gobernador Fayad, al presidente Andrés Manuel López Obrador, a los alcaldes de San Salvador, Santiago de Anaya, Chilcuautla, Tasquillo e Ixmiquilpan, así como a la empresa Coconal SA de CV.
Aseguran, que los gobiernos federal, estatal y la empresa encargada de la obra, sin permiso de las comunidades, ejidatarios, comuneros, posesionarios y propietarios, trazaron el Libramiento Ixmiquilpan.
“Ya se les hizo la advertencia de que su hostigamiento lo pagarán con retenciones y multas que ascenderán a millones de pesos”, advierten en el documento.
El año pasado, representantes de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) realizaron un recorrido por las comunidades por donde habría de cruzar el trazo de la vía para constatar el rechazo hacia esta obra del gobierno federal.
El Libramiento Ixmiquilpan conectará a Hidalgo con la red nacional de autopistas sin cobro de peaje, comprende 32 kilómetros y formará parte de la autopista de Durango-Yerbanís.
En 2020 se autorizaron 2 mil 950 millones de pesos para esta obra, que no se ha ejecutado debido a la falta de condiciones sociales.
Antonio Reyes I Ixmiquilpan
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