Conoce los aspectos que se deben considerar para tomar la mejor decisión entre comprar o rentar una plataforma de elevación. ¡Elige lo más rentable para tu empresa!
En la industria de la construcción, tomar decisiones financieras inteligentes es clave para el éxito a largo plazo.
En este contexto, una de las decisiones más relevantes que deben tomar los empresarios del sector es determinar si conviene más comprar o rentar equipos de construcción, como las plataformas de elevación. Esta elección, además de tener repercusiones financieras, también influye en la eficiencia operativa y la flexibilidad de la empresa.
Existen algunos aspectos importantes que se deben considerar al momento de decidir si es mejor la compra de una plataforma o la renta de Genie. El precio, la marca y el tipo son algunos de ellos, pero también deben tomarse en cuenta los siguientes aspectos:
Respuestas:
Mayoría de respuestas “a”:
Comprar una plataforma de elevación resulta más conveniente cuando la frecuencia de uso es alta.
Empresas con necesidades operativas constantes y presupuestos que permitan la inversión inicial pueden beneficiarse al poseer su propia maquinaria, asegurando la disponibilidad inmediata del equipo.
Mayoría de respuestas “b”:
Rentar una plataforma de elevación es la opción más ventajosa cuando la frecuencia de uso es variable y los proyectos son temporales.
Empresas con presupuestos ajustados pueden evitar la carga financiera de la compra, optando por alquilar según sus necesidades específicas.
En el ámbito empresarial, las demandas del mercado pueden cambiar de la noche a la mañana, comprar una plataforma de elevación puede ser beneficioso cuando los proyectos suelen tener una duración considerable y se prevé un uso constante.
Sin embargo, en entornos donde la demanda es variable o sujeta a proyectos específicos, el alquiler puede ser la mejor decisión.
La capacidad de adaptarse rápidamente a las fluctuaciones de la demanda sin quedar comprometido con activos que no son utilizados frecuentemente, se convierte en una buena opción para algunas empresas.
Las plataformas de elevación, como cualquier maquinaria, requieren mantenimiento regular y, en ocasiones, reparaciones, estos costos adicionales pueden acumularse con el tiempo y representar una carga financiera adicional para las empresas que han optado por comprar.
Por otro lado, los proveedores que se dedican a la renta de equipos de construcción, suelen incluir acuerdos de mantenimiento. Esto simplifica la gestión operativa y garantiza una mayor previsibilidad en los costos a largo plazo, favoreciendo la sostenibilidad financiera de las empresas que recurren al alquiler.
En un mundo impulsado por la innovación, las tecnologías emergentes pueden volverse obsoletas con el tiempo, al adquirir una plataforma de elevación, existe el riesgo de quedarse con tecnología desactualizada, lo que podría limitar la capacidad de la empresa para competir en el mercado.
Al optar por el alquiler, las empresas pueden mantenerse vigentes con las últimas tecnologías y actualizar su equipo según sea necesario para aprovechar las innovaciones más recientes sin comprometer su presupuesto.
Al evaluar la conveniencia de comprar o alquilar plataformas de elevación en México, es necesario tener en cuenta los aspectos fiscales y contables.
Cuando se compra una plataforma, su costo se registra como inversión y se distribuye a lo largo del tiempo mediante la depreciación, afectando los estados financieros, alquilar una plataforma implica gastos operativos, que son deducibles de impuestos y proporcionan flexibilidad sin incurrir en costos a largo plazo.
Al decidir entre comprar o alquilar plataformas de elevación, las empresas de construcción deben evaluar varios aspectos, como el costo inicial, la capacidad de adaptación a cambios en la demanda, los gastos de mantenimiento, la evolución tecnológica y las implicaciones fiscales y contables.
Dado que cada empresa tiene sus propias circunstancias y necesidades únicas, no hay una respuesta única. Sin embargo, al comprender completamente estas consideraciones, las empresas pueden tomar mejores decisiones que promuevan la eficiencia operativa y la sostenibilidad financiera a largo plazo.
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