Este lunes, luego de 33 años, se volvió a presentar un eclipse total de sol, que fue perceptible a 75 por ciento en la capital del estado.
Este lunes, luego de 33 años, se volvió a presentar un eclipse total de sol, que fue perceptible a 75 por ciento en la capital del estado.
Miles de personas se reunieron en la plaza Juárez, ubicada en el centro de Pachuca, donde se utilizaron telescopios y equipo especial para observar el fenómeno natural.
En el lugar, los habitantes, de todas las edades, formaron grandes filas para poder observar el eclipse desde los dispositivos especiales, mientras que otras personas pidieron lentes con filtros para poder ser testigos.
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La emoción se notaba en los más pequeños, quienes no habían percibido un evento de este tipo, pues el último eclipse total de sol ocurrió en julio de 1991.
Este fenómeno consiste en que la luna interfiere entre el sol y su camino a la tierra, por lo que se observa el recubrimiento, en algunos estados en un 100 por ciento, mientras que en otras entidades en menor proporción.
En tanto, los que sí pudieron percibir el fenómeno natural hace 33 años, recordaron la oscuridad que cubrió las calles de la Bella Airosa, a diferencia de este año, cuando solo se percibió entre un 70 u 80 por ciento.
Entre la multitud resaltó un pequeño, de tan solo nueve años de edad, llamado Julio, quien se las ingenió para crear una herramienta, con una caja de cereal, y así ver sin ningún riesgo el eclipse.
En entrevista con Criterio, el menor detalló que para su experimento utilizó también un pedazo de papel aluminio para crear un filtro protector y así se reflejara el sol.
Su herramienta fascinó a muchos de los presentes, quienes se acercaban a verla y felicitar al pequeño julio.
