El preescolar José Rosas Moreno, ubicado en La Providencia, en Mineral de Reforma, que fue cerrado el pasado 13 de diciembre por un caso de presunto abuso sexual contra un menor, sigue sin abrir, pese a que retomaría sus labores ayer.
Fuentes al interior de la institución educativa comentaron que esperan que las clases sean reanudadas, como máximo, el próximo lunes.
Las autoridades y padres de familia siguen dialogando y verificando el cumplimiento de las solicitudes que realizaron el día que se cerró la institución.
Entre las demandas, destaca la destitución del sistema de la Secretaría de Educación Pública de Hidalgo (SEPH) de la directora de la escuela, quien era la titular de ambos turnos del preescolar, además del cambio completo de la planilla de docentes, debido a la acusación de presunto encubrimiento por el abuso contra el menor y porque “al no tener identificado al agresor, todos los trabajadores del centro podían considerarse como sospechosos”.
La mañana del martes 13 de diciembre, los padres dialogaron con el procurador interino Santiago Nieto Castillo, quien aseguró que llevaría el caso personalmente, situación que fue reiterada por parte del subprocurador Arturo Flores Molina, quienes apoyaron en el aseguramiento del plantel, así como de la exdirectiva para que presentara su declaración oficial.
Hasta el momento, se desconoce si todas las demandas de los padres serán resueltas.
Galilea Monroy l Pachuca
También te puede interesar Tula-Tepeji, región más huachicolera
De las cinco regiones del estado en donde se registra actividad huachicolera, la que encabezó la incidencia de este delito durante 2022 fue la de Tula-Tepeji —que además de estos dos municipios, está conformada por Ajacuba, Atotonilco de Tula, Atitalaquia, Tlaxcoapan, Tlahuelilpan, Tetepango, Tepetitlán y Tezontepec—, con 2 mil 35 vulneraciones a ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex).
A dicha región huachicolera del estado le sigue el Valle de Tulancingo, conformada por Cuautepec de Hinojosa —demarcación con más tomas clandestinas a nivel nacional—, Singuilucan y Santiago Tulantepec, donde se detectaron mil 579 picaduras a conductos de huachicol.
