Las artesanías mexicanas son uno de los mayores legados de nuestras culturas originarias y, aunque se sabe del gran valor que tienen, hoy en día para muchos artesanos es complicado vender sus productos.

María de Lourdes Gómez Márquez, quien desde Atla, Pahuatlán, Puebla, se traslada todos los sábados a Tulancingo para vender sus bordados.

Ella elabora rebosos, huipiles, blusas de cuello v y en forma cuadrada, además de servilletas para las tortillas a través técnicas como el pepenado y el hilván.

Nos comentó que visita Tulancingo los fines de semana para promover sus productos en la catedral, en el jardín La Floresta y en el mercado; cuando no hay ventas sale a otras zonas de la cabecera municipal.

Gómez Márquez aseguró que mucha gente no alcanza a percibir lo que implica hacer ciertos bordados, en los que se llevan de un día a una semana, según la complejidad de cada pieza, pues también hay prendas que parecen ser artesanales, pe-ro se realizan con máquinas que hacen todo en serie y en tiempos muy cortos.

Te invitamos a conocer el hermoso trabajo de Lulú, a apreciar las artesanías mexicanas y a pagar lo justo por cada prenda. Ella vende desde primera hora del sábado hasta las 16:00 horas.

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Contacto:  776 134 6193

Sara Elizondo I Pachuca