Pobladores de Benito Juárez, Zimapán, buscan que las instalaciones de la empresa española Befesa se conviertan en un campus de la Universidad Autónoma de Chapingo.
Un grupo de pobladores comenzaron la gestión ante el gobierno federal para buscar un uso distinto a las 133 hectáreas de tierras, las cuales no fueron utilizadas por la compañía, tras la cancelación, en 2010, del confinamiento de residuos tóxicos.
Además, el Congreso local inició los análisis para aprovechar las instalaciones, por ejemplo, como un centro de investigación, enfocado al campo y proyectan que sea dirigido por la Universidad de Chapingo.
Tras la solicitud de un grupo de habitantes de Zimapán, el Legislativo exhortó al gobierno de México, en julio pasado, para ampliar la oferta de educación superior en la Sierra Gorda.
Actualmente, la infraestructura de Befesa se encuentra en abandono, según pobladores, se han vandalizado espacios, como los paneles solares que servirían para iluminar la planta.
Los terrenos están libres de residuos, las pocas toneladas de basura tóxica fueron enviadas a Ramos Arizpe, Coahuila, en febrero del 2020.
Entre 2009 y 2012, los zimapenses, mediante movilizaciones sociales, rechazaron la instalación del confinamiento de residuos sólidos, en un predio adquirido en comodato por la empresa española Befesa a los ejidatarios de Benito Juárez.
Antonio Reyes | Zimapán