Tianguistas dedicados a la venta de alimentos solicitaron al alcalde de Tula, Gadoth Tapia Benítez, permitir la venta de comida en las plazas de la demarcación, tal y como se ha restablecido el servicio en el mercado Felipe Carbajal Arcia, pese a que Hidalgo aún se encuentra en fase de contingencia sanitaria por coronavirus (Covid-19).

“Lo que pedimos es piso parejo para los comerciantes que nos dedicamos a la venta de alimentos, ya que llevamos varias semanas con restricciones para vender en la pandemia”, comentaron los integrantes de la Unión de Tianguistas de Tula.

Al respecto, locatarios de la central de abastos, ubicada entre las calles 5 de Mayo y Colegio Militar del centro de la ciudad, dijeron que no quieren afectar a sus compañeros comerciantes ni una sanción para ellos, derivada del incumplimiento de medidas sanitarias para evitar la propagación de Covid-19, pero reiteraron que lo único que quieren “es piso parejo”.

En entrevista con Criterio, uno de los inconformes sostuvo que las restricciones para vender en sus puestos han afectado a todos los que se dedican al giro de la comida, porque los clientes no quieren el servicio para llevar a casa.

“El comensal prefiere llegar a su hogar y prepararse él mismo sus alimentos, por lo que no come en la calle y por tanto no hace el gasto a los puestos semifijos o establecimientos que hay en el centro”, dijo el vendedor.

La venta al público es una de las tantas anomalías en las que incurren los comerciantes, principalmente los taqueros del mercado central de Tula, pues, además, ponen en desventaja a otros comercios, “ya que estos venden en sus respectivos puntos de venta y la clientela se va para allá”.

Los comerciantes insistieron en que el ayuntamiento debe revisar las anomalías, porque no se entiende “cómo a unos sí y a otros no”.

Miguel Martínez

Tula de Allende