Con la última ofrenda del año y el ritual del “destape de máscaras”, los huastecos despidieron el Xantolo (festejo de Día de Muertos en la región), el cual se celebra en algunas localidades hasta el 30 de noviembre, día dedicado a San Andrés.
Según la Dirección de Cultura de Huejutla, encabezada por Mario Bustos Escobar, en esa fecha los danzantes que se disfrazaron durante los primeros días de noviembre revelan su identidad y en los hogares se retira el altar dedicado a los difuntos.
Por lo anterior, la Secretaría de Desarrollo Social, en coordinación con la dependencia mencionada y Turismo, llevó a cabo la última ofrenda, dedicada a San Andrés, como parte del cierre del Xantolo 2020.
Durante el ritual del “destape de máscaras”, los integrantes de las cuadrillas de danzantes se quitaron el disfraz y revelaron su identidad. En esta ocasión se contó con la participación de la cuadrilla de la colonia Horacio Camargo, cuyos miembros, al ritmo de sones huastecos, ejecutaron su zapateado.
Además, en la ofrenda de la luz dedicada a los difuntos, que de acuerdo con la tradición visitaron el mundo de los vivos durante el Xantolo, se hizo la última purificación para despedir a los seres queridos.
Debido a la pandemia del Covid-19, el altar a San Andrés se llevó a cabo siguiendo los protocolos sanitarios para evitar la propagación del virus y preservar las tradiciones.
Según Noé Hernández Morales, habitante de la colonia San José Potrero, el ritual del “destape de máscaras” tiene connotaciones espirituales, pues los disfrazados desempeñan el papel de las ánimas.
Explicó que en el acto cada participante tiene una madrina que porta una vela encendida para representar la luz que alumbra el camino de regreso de los difuntos, mismos que, al despojarse del disfraz, son rociados con aguardiente para ser purificados.
Salomón Hernández
Huejutla
Durante este miércoles, en Hidalgo 106 personas fueron diagnosticadas con el virus SARS-CoV-2, mientras otros 17 individuos fallecieron a causa de complicaciones del padecimiento.