El instructor de Bomberos de Huejutla, Carlos Hidalgo Contreras, indicó que en la explosión del polvorín de Jaltocán “arriesgaron sus vidas”, junto con personal de Protección Civil, policías y ciudadanía que apoyó, pues en el domicilio guardaban bombas marinas, fuegos pirotécnicos y producto para realizar pólvora.
Explicó que al arribar al sitio preguntaron al propietario qué tipo de artefactos había en el inmueble, este dijo que “palomitas, chifladores, cohetones y de luces”.
Más tarde llegó el hijo del dueño, quien mencionó que en la parte de arriba habían alrededor de 15 bombas marinas y unos 20 costales con fuegos pirotécnicos.
Indicó que, en caso de que hubieran explotado las bombas marinas, hubiera ocasionado una tragedia, pues bomberos, policías, socorristas y vecinos del lugar podrían haber perdido la vida.
“Por fortuna, los dos cuartos del segundo piso fueron enfriados; fue necesario romper las ventanas para rociar los costales con pirotecnia. El fuego fue controlado tras hora y media, en la planta alta, baja y en otro domicilio ubicado en la parte trasera, que resultó incendiada”, dijo el instructor.
Francisco Bautista
Jaltocán