De ganar la presidencia de México, Andrés Manuel López Obrador pretende acabar con la corrupción, gobernar con austeridad, y los recursos que se ahorren destinarlos al desarrollo.

Durante una conferencia, en el marco de Expo ANTAD, el aspirante presidencial de la coalición Juntos Haremos Historia descartó incrementar impuestos y aseguró que no creará nuevos gravámenes, ni cobrará IVA en medicinas y alimentos, además de que no habrá gasolinazos.

“Que no va a alcanzar, yo digo que sí”, aseguró López Obrador.

“Es mucha la corrupción y son muchos los privilegios en el gobierno y ya lo hice cuando fui el jefe de gobierno en la Ciudad de México”.

López Obrador explicó que gracias a su política se pudieron financiar programas sociales en la capital del país, lo que a la postre derivó en la crítica de que es populista y paternalista.

“Ya ven, todo lo que se hace de parte de nosotros le llaman de esa manera, populismo, paternalismo, ahora ya hasta mesiánicos somos y lo de Venezuela, que aprovecho también para decirles, como dicen los jóvenes, ‘ya chole’ con eso, no tengo nada que ver con el Gobierno de Venezuela, no conocí al finado Chávez, no conozco a (Nicolás) Maduro, no conozco Venezuela, nunca he tenido ninguna relación con el Gobierno de Venezuela”, manifestó.

“Ni verdes ni maduros, este es un movimiento nacional para acabar con la corrupción y lograr el renacimiento de México”.
El exjefe de Gobierno del Distrito Federal se comprometió a fortalecer el mercado interno y a volcarse a apoyar las actividades productivas, lo que generará crecimiento económico y empleos, además de que mejorará la capacidad de compra.

Al abordar el tema de la seguridad, Lopez Obrador dijo que en su administración, el presidente atendería directamente este problema y ofreció volver a crear la Secretaría de Seguridad Pública federal y nombrar a una mujer al frente de la Secretaría de Gobernación.

Francisco de Anda
Agencia Reforma