Con más de 20 mil casos acumulados de coronavirus (Covid-19), así como dos picos de contagio durante la pandemia, Hidalgo se encuentra en una tercera tendencia de ascenso, en medio de la época del año en la que también confluyen padecimientos respiratorios e influenza.
A nueve meses del comienzo de la contingencia sanitaria por la pandemia, y con recursos humanos y materiales desgastados, la entidad enfrenta un tercer pico de transmisiones, toda vez que tan solo en los primeros 15 días de diciembre 2 mil 286 personas han dado positivo a la prueba del virus SARS-CoV-2, que produce la enfermedad del coronavirus.
El 19 de marzo pasado, autoridades estatales reconocieron formalmente los dos primeros casos de infección por Covid-19. Los portadores, hombres originarios de Pachuca y Mineral de la Reforma, adquirieron el agente patógeno durante viajes en el extranjero.
Esa fue la tendencia de los contagios; es decir, las primeras personas de origen hidalguense en contraer la cepa viral lo hicieron durante estancias en Estados Unidos y países de Europa o, sitios donde comenzó la dispersión del virus antes que en México.
Aunque el tipo de transmisiones pasaron de ser importadas a ser comunitarias –sin contar con antecedente de viaje al extranjero–, la propagación de la enfermedad se mantuvo estable durante los primeros tres meses de la contingencia sanitaria; no obstante, a partir de julio se observó un aceleramiento en el número de casos.
De esta manera, el primer pico de contagios en el estado se registró durante agosto, periodo en que se confirmó la existencia de 3 mil 393 positivos. En los dos meses subsecuentes, se reportaron 2 mil 387 y 2 mil 495 diagnósticos afirmativos, es decir, se presentó una tendencia a la baja.
Sin embargo, en noviembre –tras haberse celebrado el proceso electoral local para renovar ayuntamientos–, la entidad sufrió un segundo repunte de ciudadanos con coronavirus, toda vez que se detectaron 3 mil 320 personas afectadas por el padecimiento respiratorio.
Asimismo, el tercer pico de la pandemia se está viviendo durante el mes en curso, ya que, en tan solo 15 días, 2 mil 286 personas han contraído la infección. De hecho, desde el pasado 20 de noviembre, en Hidalgo se han confirmado más de cien casos diarios de coronavirus, excepto por el 3 de diciembre, cuando se reportaron 98.
Para hacer frente a la pandemia, el gobierno del estado llevó a cabo las primeras medidas desde enero de 2020; posteriormente, el 16 de marzo, se presentó el operativo Escudo, estrategia que contempló 50 esquemas preventivos, de intervención, de carácter social, económico y de salud para contrarrestar el impacto del Covid-19.
Algunas de las medidas realizadas fueron la suspensión de eventos públicos del gobierno de Hidalgo, filtros de acceso en todas las dependencias de la administración de la entidad, además de la interrupción de clases, a partir del 20 de marzo.
Asimismo, dentro de dicho plan, se puso en operación el Hospital de Respuesta Inmediata el pasado 18 de marzo. Esta infraestructura móvil cuenta con 40 camas de hospitalización y 10 ventiladores; posteriormente, el 23 de abril, la clínica fue dotada con un tomógrafo de 128 cortes, que permite determinar el posible daño sufrido en los pulmones de una persona con coronavirus.
De igual forma, comenzaron a funcionar tres nosocomios más de Respuesta Inmediata en Actopan, Huejutla y Huehuetla.
También, desde marzo pasado, se reconvirtieron 12 hospitales de los servicios de Salud, de modo que, sumados a los del sector, se alcanzó una infraestructura hospitalaria de 835 camas para la atención de casos graves de SARS-CoV-2.
Mientras, en coordinación con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), las autoridades en la materia operan cuatro clínicas para la atención de pacientes que padecen la enfermedad, mismas que se ubican en Metztitlán, Zimapán, Huichapan y Pachuca, y se habilitaron tres unidades Covid-19 en los nosocomios de la capital hidalguense, Tulancingo y Tula.
Por otra parte, el 4 de mayo entró en vigor el programa Hoy no Circula Sanitario, a efecto de reducir la movilidad en la vía pública, pues el estado se encontraba en los últimos sitios a nivel nacional con mayor movimiento de personas, aunque el 28 de septiembre se anunció que este esquema sería más flexible.
En lo que respecta al semáforo epidémico, herramienta que determina el nivel de riesgo de contagio, así como las actividades que es posible realizar durante los 14 días que tiene de vigencia, Hidalgo se mantiene en color naranja –peligro medio–, desde el pasado 31 de agosto; sin embargo, el 4 de diciembre, autoridades sanitarias del gobierno federal advirtieron que podría regresar a rojo.
En lo que respecta a fallecimientos derivados por coronavirus de personal médico, el titular de la Secretaría de Salud del estado (SSH), Alejandro Benítez Herrera, informó durante su comparecencia ante el Congreso local, el pasado 27 de octubre, que 42 trabajadores de la salud habían perdido la vida, de los cuales 25 se desempeñaban como médicos.
El funcionario también indicó al parlamento local que, debido a la pandemia, el gobierno del estado, a través de la Secretaría de Finanzas, tuvo que erogar 402 millones de pesos en recursos adicionales para la operación de 16 hospitales de la red estatal, recursos humanos y medicamentos.
Yuvenil Torres l Pachuca
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