La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha emitido nuevas estimaciones que predicen un aumento en los diagnósticos de cáncer a nivel mundial, con una cifra alcanzará los 35 millones en el año 2050. Este cálculo representa un crecimiento del 77 % en comparación con los 20 millones de casos diagnosticados en 2022.

Estos datos fueron publicados por la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer de la OMS, abarcan 185 países y 36 formas de la enfermedad. Una de las revelaciones más preocupantes, es la que dice que el cáncer de pulmón lidera como la forma más común en todo el mundo en 2022, siendo responsable de 2,5 millones de casos, equivalente al 12,4% del total. Asimismo, este tipo de cáncer encabeza las estadísticas de mortalidad, cobrándose la vida de 1,8 millones de personas, aproximadamente el 19% del total.

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La investigación también evidenció desigualdades en la carga del cáncer, especialmente en naciones desarrolladas. En países con un índice de desarrollo humano muy alto, las tasas de diagnóstico y mortalidad por cáncer de mama son notoriamente más altas que en aquellos con un IDH bajo. Estas disparidades se atribuyen, en gran medida, a diagnósticos tardíos y la falta de acceso a tratamientos adecuados.

El Dr. Bente Mikkelsen, director del Departamento de Salud de la OMS para Enfermedades No Transmisibles, subrayó la falta de protección financiera contra el cáncer en todo el mundo, especialmente en países de ingresos bajos. Instó a la necesidad de inversiones significativas para abordar estas desigualdades y promover la atención del cáncer para todos.

Los investigadores identifican varios factores que impulsarán este aumento proyectado, que incluyen la obesidad, el tabaquismo, el consumo de alcohol y factores ambientales como la contaminación del aire.

En Estados Unidos, las tasas de mortalidad por cáncer han disminuido en las últimas décadas, gracias a la reducción del consumo de tabaco, detección temprana y avances en tratamientos. Sin embargo, el informe destaca persistentes disparidades raciales y la creciente incidencia de ciertos tipos de cáncer en personas más jóvenes.

El presidente Joe Biden ha priorizado la lucha contra el cáncer, con iniciativas como Cancer Moonshot, que busca reducir a la mitad las muertes por cáncer en Estados Unidos en los próximos 25 años. Diversas agencias, como la NASA y la Agencia de Protección Ambiental, se han comprometido a colaborar en este esfuerzo.

El Dr. Cary Adams, director de la Unión para el Control Internacional del Cáncer, enfatizó que la atención del cáncer no debe determinarse por la ubicación geográfica de una persona y subrayó la importancia de la voluntad política para abordar esta creciente crisis de salud mundial.