Paulo Pezzolano aseguró que la ausencia de la afición en el Hidalgo ha derivado en la floja productividad de los Tuzos como local, y la estadística le da la razón.
Desde que comenzó la pandemia por el nuevo coronavirus, el Pachuca ha disputado 24 partidos en la “nueva normalidad”, de los cuales 18 han sido a puerta cerrada y solo seis con el público en las gradas.
La efectividad en sus duelos en solitario es apenas del 37.04 por ciento, con ocho derrotas, cinco empates y cinco victorias. Contrario, cuando abrieron sus puertas, su porcentaje subió hasta 72.22, con cuatro triunfos, un empate y un revés.
Luego de 376 días, el 18 de marzo pasado la directiva tuvo luz verde para el regreso de la afición; sin embargo, en las semis, contra Cruz Azul, el Huracán tuvo sobrecupo, lo que les dejó un partido de veto por parte de la Federación Mexicana de Futbol.
Esta próxima fecha, los Tuzos visitarán al Guadalajara y, posteriormente, tendrán dos duelos en fila como local, frente al Necaxa y América, en los que la directiva espera la anuencia de las autoridades para reabrir su feudo al público.
Alejandro Velázquez I Pachuca
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Luego de poco más de cuatro meses, el estadio Hidalgo reabriría sus puertas para los próximos duelos de los Tuzos como local.
De acuerdo con la circular sobre medidas sanitarias a los ayuntamientos, publicada en el Periódico Oficial del Estado de Hidalgo (POEH), los eventos deportivos, profesionales y amateurs, pueden celebrarse nuevamente con un 30 por ciento de aforo.
Así, la gente volvería a las gradas cuando los Tuzos le hagan los honores al Necaxa y al América, el 23 y 28 de septiembre, respectivamente, en los dos encuentros consecutivos que tendrán en el Huracán.
