Adalid Maganda se persignó al escuchar las campanadas de la Catedral Metropolitana. Es el momento de paz antes de la tormenta, ya que el 15 de marzo bloqueará las instalaciones de la FMF.

“Vamos a hacer un plantón permanente a las afueras de la FMF, allá en Toluca, para ver si así nos hacen caso. Le hago un llamado a todas las personas que se quieran unir a la causa.

“Si quieren pelea la van a tener hasta que quiten a ese racista, que es (Arturo) Brizio. ¡Fuera Brizio!, no vamos a permitir que siga pisoteando a los árbitros del País. Pretendemos, una: recuperar mi empleo, que me costó mucho tiempo para conseguirlo; otra: que se vaya Brizio, voy a regresar al arbitraje siempre y cuando el racista de Brizio ya no esté ahí; otra, si ya no me quieren ahí me deben indemnizar conforme a la ley, no lo que ellos me quieran dar”, dijo Maganda.

A Adalid lo acompañó incluso su madre. En la plancha del Zócalo capitalino estaban también Carlos González Cervantes y Arturo Serratos Alcaraz, dos exárbitros que llevan años (6 y 10, respectivamente) de una larga pelea legal contra la FMF.

Maganda acusa despido injustificado por motivos racistas.

Su abogado Proceso González Calleja dijo que con el plantón no infringen la ley.

“Sí tememos porque las represalias se han visto y esperamos mucho después de lo que hemos visto de parte de la FMF, pero vamos a acudir a los órganos de Derechos Humanos para que estén pendientes, nosotros no vamos agrediendo a nadie ni queremos afectar en sus derechos a terceras personas”, comentó.
Édgar Contreras I Agencia Reforma