En un estadio repleto y hostil, la campeona del mundo Francia aspira hoy, ante Hungría, a una clasificación anticipada para octavos de final de la Eurocopa, bajo el calor de Budapest.

Los Bleus quieren dejar sellado el pase a las rondas eliminatorias antes del peligroso compromiso frente a Portugal el miércoles.

Una victoria ante el rival más asequible y el equipo de Didier Deschamps habrá sobrevivido al grupo de la muerte: antes incluso de desafiar a Cristiano Ronaldo y su ejército de defensores del título.

Los Bleus descubrirán el Puskas Arena y sus 68 mil localidades (60 mil 500 para la Eurocopa) con la confianza que otorga haber derrotado 1-0 a Alemania en su casa.

Los galos han reencontrado la intensidad que mostraron en el Mundial 2018 y no han temblado en sus primeros partidos fuera de casa con público, después de un año de puertas cerradas prácticamente de forma sistemática.

En este segundo duelo en casa de su rival, si el adversario sobre el césped— 37º en la clasificación FIFA— es ‘a priori’, muy inferior a Alemania, los decibelios en el único estadio de la Eurocopa con el 100 por ciento del aforo y temperaturas cercanas a los 30 grados pueden jugar contra Francia.

El trío de delanteros Kylian Mbappé, Karim Benzema y Antoine Griezmann aún no ha deslumbrado. Benzema busca un primer gol desde su regreso por sorpresa a los Bleus, Griezmann quiere recuperar su influencia tras su oscuro partido en Múnich y Mbappé, por último, concretar sus incesantes ataques con su primer gol en la Eurocopa.

AFP I Budapest