Raúl Jiménez marcó un golazo de volea para que el Wolverhampton se mantuviera en puestos europeos, pero Doherty echó todo a perder en la compensación en el empate 1-1 frente al Burnley.

Al 90+6’, en el último minuto, Chris Wood convirtió de penal, luego de la mano de Matt Doherty.

Un empate con sabor a derrota. Raúl estaba encaminado a ser el héroe con su gol 17 en Premier League, pero al final las cámaras de televisión lo enfocaron y traía el rostro desencajado. De poco sirvió su golazo de volea, de las mejores ejecuciones en su gran temporada.

Y es que de estar en puestos de Europa League y hasta soñar con Champions, ahora los Wolves podrían abandonar la zona europea.

Wolverhampton sigue sexto, con 56 puntos, pero apenas tiene uno más que el Tottenham y este día podría ser rebasado por el Sheffield United.

Y de ahí para arriba. En la quinta posición de la Premier está el Manchester United, con 59 unidades y aún con su duelo pendiente de esta fecha. El cuarto es Leicester, con 59 puntos, y hoy tiene un cruce complicadísimo frente al Sheffield United.

Fue un partido complicado para el Wolverhampton. Raúl gozó de pocas oportunidades, lo más destacado había sido un disparo por encima del travesaño, al comienzo del segundo tiempo, jugada que el mexicano se fabricó solo con un regate.

Cuando impactó la pelota de volea, desató la euforia. Su técnico Nuno Espírito Santo se fundió en un abrazo con sus auxiliares. Sacó a Raúl al 84’, así que Jiménez vio desde las gradas cómo al 94’ Rui Patricio cometió un error en una mala salida y de milagro Chris Wood no empató, en una falla candidata al oso de la temporada. Dos minutos después, Wood fue letal desde los 11 pasos.

Edgar Contreras I Agencia Reforma