Justo en el Día del Hombre, para celebrarlo, una mujer, cansada de los maltratos y vejaciones, decidió darle su merecido a su maltratador y le dio varias puñaladas hasta matarlo.

En este mismo Mes de la Mujer, madre e hija ajusticiaron al padrastro y lo apuñalaron hasta casi acabar con él.

En contraste, en el mero 8 de marzo, una mujer aparecía muerta en la zona del Valle del Mezquital. Así se puede seguir la lista de situaciones violentas y asesinatos que solo hablan de un ambiente totalmente agresivo en el que ya no hay situaciones a medias.

De nada sirve que las autoridades se llenen la boca diciendo que los homicidios dolosos han disminuido, si ya solo en este mes llevamos varios muertitos, pero esos ya no entraron en la estadística mensual.

Lo cierto es que el nivel de violencia aumenta de manera alarmante y todo parece indicar que nada lo puede parar.

Las agresiones hacia las mujeres son cosa de todos los días y ahí está el resultado, cansadas de ser violentadas, las mujeres respondieron con el mismo nivel de agresividad, aunque en esta ocasión los hombres salieron perdiendo.

Sin embargo, la estadística macabra no es como para enorgullecerse ni para demostrar quién va ganando en el marcador.

Las cosas no van bien y quien afirme lo contrario o no vive en el estado o trata de ignorar los hechos o le vale madre o se hace güey o dicen tener otros datos o todo junto, total que es más fácil esconder la basura debajo del tapete.

Y para acabarla de chingar, estamos en periodo electoral y mientras decenas de candidatos de todos colores y sabores hacen sus recorridos estrechando manos, besando niños y abrazando viejitos, en algunas zonas de la entidad, como es el caso de Tula, Tepeji del Río, Tezontepec y municipios cercanos, incluyendo a Ixmiquilpan, las ejecuciones son cosa de todos los días.

Pero eso no lo ven los candidotes que, con tal de cumplir con su cuota de apapachos, no balazos, ignoran una realidad que lastima a los ciudadanos.

Seguramente argumentarán en descarga que los ejecutados en esta región es porque andaban en malos pasos, y puede que tengan razón, pero hay mucha gente inocente que en ocasiones se queda en medio del fuego cruzado… ¿Y ahí qué van a decir? ¿Que fue mala suerte?

Total, que la descomposición social nos está alcanzando y en ocasiones ya nos rebasó y parece que los malosos amenazan con ganar la batalla como ya ocurre en otros estados del país.

La estrategia de seguridad necesita o una aceitada, una revisada y por supuesto una aplicación de la ley que no permita recovecos legales para la impunidad.

Lamentablemente hay en la calle una serie interminable de personajes, merolicos electorales, todos ellos con la sonrisa fácil y la amabilidad espontánea, pero que poco o nada les interesa el bienestar y la seguridad de los ciudadanos que están dispuestos a embaucarlos diciendo que son ellos y no otros los elegidos para conducir el destino de Hidalgo.

Palabras más, palabras menos.

Después del trágico suceso donde un menor murió a consecuencia de una caída que le provocó un traumatismo craneoencefálico, ahora será la procuraduría la encargada de hacer una investigación impecable que permita que un padre reciba la justicia que pide a gritos, que no haya victimización de dos menores, que haya un juicio justo e imparcial para los profesores y sobre todo que regrese la tranquilidad a una comunidad escolar a la que la violencia también le ha llegado.

Es muy sencillo acusar sin pruebas y criminalizar sin haber escuchado los argumentos legales que lleven a conocer con certeza lo que ocurrió en el aula. De no ser así, estaremos solo en el terreno de la especulación.