Según el testimonio de la maestra, el incidente ocurrió durante el receso escolar, deslindándose así de cualquier responsabilidad
El Juez Segundo de Distrito Penal ha concedido una suspensión provisional a la docente Flor “N”, quien enfrenta acusaciones de homicidio culposo por la muerte del niño Adriel, víctima de bullying en Santiago de Anaya.
La maestra, en un intento por evitar ser aprehendida, solicitó un amparo argumentando que no es responsable de los hechos. Según su testimonio, el incidente ocurrió durante el receso escolar, deslindándose así de cualquier responsabilidad en el suceso.
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Para garantizar su libertad temporal, la docente habría desembolsado diez mil pesos como garantía económica. Sin embargo, se espera que en caso de ser convocada por la autoridad judicial, deba comparecer en una audiencia. De no hacerlo, podría enfrentar la ejecución de una orden de aprehensión por parte de las autoridades competentes.
Fue el 9 de marzo pasado cuando Adriel, de 11 años, originario de Santiago de Anaya, falleció en el hospital regional de Actopan. Los médicos informaron a su familia, que el menor ya no presentaba ningún signo de vida, después de estar hospitalizado cinco días.
Criterio informó que el menor fue declarado con muerte cerebral, derivado de los golpes que recibió en la primaria Benito Juárez, ubicada en la comunidad Xitzo, perteneciente a Santiago de Anaya.
Hace unos días la jueza de control del Tercer Distrito Judicial en Hidalgo emitió una orden de aprehensión contra el director (Rufino J.R.) y una maestra, hasta el momento se sospecha que el educador podría haber abandonado su domicilio e intentado salir del país.