“¡No hay secreto!”, dice arqueando los ojos Mario Hernández Alonso, dueño de la única taquería en hacerse acreedora a una estrella de la famosa Guía Michelin.
Situada sobre la populosa y comercial avenida de San Cosme, del barrio San Rafael, centro de Ciudad de México, El Califa de León fue fundado hace más de 50 años por la madre y el padre de Alonso.
Te puede interesar: Vive el regreso de los EMOs a Pachuca, con un evento imperdible
Únete a nuestro Canal de Whatsapp y recibe las noticias en tiempo real https://bit.ly/3S0OztH
“Decía mi padre ‘¿Quieres que te diga el secreto de la carne? ¡No hay secreto!’”, solo “cariño y esfuerzo”, añade Alonso de 66 años, afuera del pequeño local, por momentos con la voz quebrada de la emoción.
Su padre también le pedía que siempre cuidara “la calidad de los productos, la atención a los clientes y los precios” porque “la vida es una rueda de la fortuna y hay ocasiones que estamos muy arriba y ocasiones en las que estamos muy abajo”.
Adentro apenas caben tres o cuatro personas comiendo paradas, mientras el taquero cocina las carnes sobre la plancha y otra empleada prepara a mano las tortillas de maíz.