Luis Luciano Rodríguez Crisóstomo, representante de la Asociación de Bares y Cantinas de Tizayuca, reconoció que tras un año de pandemia siete establecimientos de dicho giro se han declarado en quiebra.

En entrevista con Criterio, el representante argumentó que, de acuerdo con sus colegas, les rebasó el pago de luz, agua y predial para poder laborar con certidumbre en el municipio, pues han permanecido cerrados casi un año.

“Fueron siete negocios los que ya se comunicaron que no van a regresar; nos sentimos tristes por ellos, porque al final del día lo que buscamos únicamente es laborar para el beneficio de nuestras familias”.

En el caso de los establecimientos que continúan vigentes, Rodríguez Crisóstomo aseveró que mantienen adeudos debido a préstamos que han solicitado para estar al corriente de sus pagos.

El dirigente indicó que apela a la buena voluntad de la Asamblea para la reapertura de los establecimientos del giro nocturno; agradeció que en la última sesión de Cabildo se les tomara en cuenta para realizar mesas de trabajo sobre la posibilidad de volver a abrir sus puertas.

Indicó que el acercamiento con representantes del sector Salud y de la Dirección de Reglamentos se iniciaría a partir de la siguiente semana.

Alfonso Marín

Tizayuca