Ambientalistas con presencia en la región de Tula alertaron de eventuales riesgos por la operación total del Túnel Emisor Oriente (TEO), inaugurado el pasado 23 de diciembre por el presidente Andrés Manuel López Obrador.

René Romero Rivera, miembro de Red de Consciencia Ambiental Queremos Vivir, dijo que “por lo que se ve”, en tiempo de “seca” el túnel no se ha puesto en “real” funcionamiento, “porque no ha sido necesario, pero eso cambiará cuando arranque formalmente en tiempo de lluvia”.

Aunque no ha sido activado completamente, en semanas pasadas, previo a su inauguración, sin precisar fecha, varios integrantes de su agrupación detectaron volúmenes inusuales en el río: “Hubo un incremento considerable de agua en semanas anteriores”.

Romero Rivera tiene la sospecha de que el túnel fue sometido a pruebas sin avisar a la ciudadanía tulense, por lo que demandó a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) aclarar los aspectos pendientes, como decir cuál será el verdadero volumen de aguas negras que llegará al municipio.

El activista exigió la reposición de los “cientos” de árboles que se derribaron y bordos del río que se destruyeron con la obra de revestimiento del cuerpo de aguas residuales, pues podría ser un factor más de riesgo una vez que la obra se utilice a cien por ciento de capacidad.

Sobre los volúmenes de residuos que se han vertido al río desde que fue inaugurado el TEO,  el director de Protección Civil (PC) de Tula de Allende, Jesús Vera Guerrero, indicó que no ha habido variaciones en cuanto a cantidades del líquido vaciado.

Miguel Ángel Martínez

Tula de Allende