A más de dos meses de la explosión de un ducto de Petróleos Mexicanos (Pemex) en San Primitivo, Tlahuelilpan, que ha dejado 135 fallecidos, persiste el huachicoleo en la zona, aseveraron autoridades municipales.
Pese a la presencia de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en la demarcación, la mañana de ayer se detectó una fuga de combustible, que alcanzó 10 metros de altura, en el ejido Juandhó, informaron elementos de Protección Civil (PC) local y personal de Pemex.
El área de Comunicación Social de la petrolera dio a conocer que la toma clandestina fue encontrada a las 8:45 horas y que, alrededor de las 11:00, lograron controlarla.
El incidente ocurrió en una zona despoblada, por lo que no hubo lesionados.
Al respecto, elementos policiacos confirmaron que en la franja que comprenden Tlaxcoapan, Tlahuelilpan, Tetepango y Mixquiahuala existe un grupo de huachicoleros que perfora los ductos para sustraer hidrocarburo.
Agregaron que, durante los rondines que realizan en la localidad Cerro de la Cruz, han hallado halcones, quienes vigilan a pie o en motocicleta la zona.
“Un tiempo se calmó un poco, pero hay mucha gente que se dedica al robo de hidrocarburo; ahora hay más vigilancia. Es constante la presencia de los militares, pero los huachicoleros se las ingenian para cuidar a los castrenses y saber en qué momento pueden sustraer la gasolina”, aseveró un elemento.
Criterio buscó la versión del director de Seguridad Pública (SP) de Tlahuelilpan, Javier Cortés Rodríguez, pero no fue localizado.
Jesús González l Tlahuelilpan
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