El titular de la Contraloría municipal, Salvador Cruz González, dijo estar consciente de que ser omiso te convierte en parte del problema, pero aseguró que no es el caso de la actual administración, porque en 2020 hubo una auditoría por parte de la Contraloría estatal, de la que derivaron observaciones a obras ejecutadas por el gobierno que los antecedió, entre estas el Parque Aventura Tulancingo, en el que se destinaron recursos del municipio por más de seis millones de pesos.

En ese sentido, puntualizó que se iniciaron los procedimientos administrativos desde 2021: “Se están terminando en la autoridad investigadora, para que se llegue a sustanciar y ya se declare como una falta grave o no grave”.

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Cruz González detalló que en el procedimiento administrativo convocan a todas las partes involucradas, tanto los proveedores como los exservidores públicos.

Refirió que desde que se inició la gestión de Jorge Márquez Alvarado buscaron la forma de echar a andar el Parque Aventura Tulancingo, pero no ha sido posible porque aunque cuenta con estaciones de descanso, carece de bajadas, entre otras observaciones que no han sido solventadas por la anterior administración, lo cual impide su entrega-recepción, y mientras no se cumpla con ello, la administración en turno no puede “tocarlo”.

El funcionario insistió que cumplirá con los tiempos que establece la Secretaría de Contraloría de Hidalgo, cuyo titular, Álvaro Bardales, recién dijo que el 31 de diciembre vence el ultimátum para que el acta de entrega-recepción del Parque Aventura Tulancingo quede terminada y finiquitada; de no ser así, la dependencia homóloga municipal deberá iniciar los procedimientos de responsabilidad y si no lo hace habrá sanciones.

María Antonieta Islas | Tulancingo