Hace 22 años, el antiguo Psiquiátrico Fernando Ocaranza fue reconfigurado para dar paso al Hospital Villa Ocaranza, el cual estrenó instalaciones en las inmediaciones del viejo edificio, donde actualmente viven 86 pacientes clasificados como crónicos, de ellos, solo cinco son visitados por sus familiares.

Dos décadas después, el nosocomio ubicado en Tolcayuca requiere mejoras, indicó Gloria Guadalupe Tafoya Arellano, directora del lugar, pues 40 por ciento de los inquilinos de este centro médico son geriátricos; algunos llevan 54 años en el lugar, y el resto son mayores de 40 años; además de la atención especializada, muchos de ellos requieren sillas de ruedas, andadores o bastones, para su desplazamiento.

Indicó que existen tres áreas de oportunidad para la mejora de la Villa, la primordial —explicó—, es la de la infraestructura, por lo que ya comenzaron con el mantenimiento de las casas donde habitan los pacientes; la segunda tiene que ver con el abasto de medicamentos, pues solo estaban recibiendo 40 por ciento de lo necesario, “situación que se está regularizando”.

Y el tercer punto que apremia es mejorar el área de lavandería, puesto que la limpieza de ropa de vestir y de cama de 86 personas requiere de las herramientas necesarias, entre ellas una secadora, para evitar depender del clima para su secado.

Tafoya Arellano detalló que las personas insitucionalizadas; es decir, las que residen en el hospital, son vulnerables por la misma patología que presentan, la más común, retraso mental, pero también se ofrece consulta externa en casos de esquizofrenia, trastornos depresivos y por consumo de sustancias.

Detalló que “para seguir mejorando los servicios que se brindan y la atención”, el personal ha sido capacitado en diversos temas, pero en especial, en derechos humanos.

Indicó que en lo que va del año han atendido a más de 7 mil personas en consulta externa, quienes acuden por atención psicológica, provenientes de Hidalgo y Estado de México.

Los pacientes son canalizados desde unidades médicas de primer nivel, pero también admiten  a aquellos que acuden por su propia cuenta a la institución.

Para mejorar la calidad de vida de los inquilinos de la Villa, el nosocomio recibe donaciones en especie, de materiales para el taller, muebles en buen estado o ropa, detalló.

Galilea Monroy I Pachuca

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