El secretario de Gobierno, Simón Vargas Aguilar, señaló que, hasta el momento, no se tiene registro de casos de intolerancia religiosa en la Huasteca, puesto que se tratan de problemas sociales generados por la diversidad de usos y costumbres entre los pobladores.
El titular de la dependencia mencionó que la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Hidalgo (CDHEH) documentó la denuncia de dos familias en la comunidad La Mesa Limantitla por el corte en el suministro de agua y faenas obligatorias por parte de otros habitantes, puesto que no compartían la misma creencia (católica).
Ante estos hechos, Vargas Aguilar dijo que se trata de un tema cultural y que trabajan en coordinación con asociaciones religiosas y delegados de las comunidades para determinar que las discusiones no tengan relación con distintas devociones.
Agregó que los conflictos ocurren porque, en ocasiones, algunas familias no quieren colaborar con trabajos comunitarios, lo que provoca el enojo de las demás personas, ya que consideran que evaden la tarea que todos deben hacer.
Además, manifestó que cuando se suscitan incidentes derivados de usos y costumbres mantienen la comunicación con todos los grupos religiosos para que se privilegie el diálogo, debido a que, expresó, es un tema arraigado en la región.
El secretario estatal abundó que gobierno del estado tiene una Dirección de Asuntos Religiosos, coordinada por Iván Huesca Licona, que atiende conflictos relacionados con temas dogmáticos en la entidad cuando las partes son de diferente credo.
Salomón Hernández
Huejutla
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