El automovilista fue sometido a usos y costumbres de Huejutla, estuvo retenido 50 horas hasta que pagó la multa que le impusieron.
Tras estar retenido más de 50 horas por atropellar a una niña, el conductor de una camioneta estaquitas fue liberado de la barandilla comunitaria de La Corrala, Huejutla. Trascendió que la multa, impuesta por usos y costumbres, fue de 100 mil pesos porque presuntamente circulaba con exceso de velocidad y aliento alcohólico.
El imputado transitaba por la carretera estatal La Corrala-Huejutla cuando atropelló a una menor de edad que caminaba a la orilla de esta vía. Luego de percatarse del incidente, el conductor bajó de su unidad y, acompañado de familiares de la menor, la trasladó a una clínica particular.
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Los integrantes del Comité de la localidad y el delegado de La Corrala, Florentino Grande, llegaron al nosocomio y trasladaron al conductor a barandilla, y luego de una asamblea comunitaria, acordaron imponerle una multa de 100 mil pesos.
Sin las condiciones que establece derechos humanos, el conductor permaneció en la barandilla aun después de que la niña de nueve años había sido dada de alta, pero la condición para recuperar su libertad era pagar la multa, aunque sus familiares manifestaron que no tenían esa cantidad de dinero.
En los accesos a la comunidad, los representantes comunitarios ya habían colocado anuncios que advierten que quien circule a más de 20 kilómetros por hora al cruzar el poblado, tendrá que pagar una multa de 5 mil pesos.
Asimismo, los vecinos prevén la colocación de topes, debido a que la mayoría de los choferes no atienden de las advertencias de no conducir rápido en esa localidad; además, argumentaron que la multa se decidió así para que reflexionen que tendrán que pagar una fuerte suma si no moderan su velocidad.