La Dirección de Bomberos y Protección Civil (PC) de Tulancingo, con apoyo de personal especializado de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), ayer, destruyó 357 kilogramos de pirotecnia, que se suman a los mil 146 kilos inhabilitados el 13 de diciembre de 2023.

El titular de PC, Jesús García Ávila, informó que los más de mil 500 kilogramos de detonantes provinieron de distintos decomisos, sobre todo a vendedores ambulantes y en la central de abasto Pifsal.

Comentó que, durante los festejos decembrinos y de fin de año, muchas personas vendieron pirotecnia en las calles, incluso hubo quienes traían cubetas con fruta, pero debajo de esta escondían los detonantes.

“Años atrás, una señora llevaba a su hijo en brazos, sujeto con un rebozo, en el que también escondía la pirotecnia. A veces, por ignorancia y la necesidad de ganarse unos pesos, no miden el peligro que esto implica”, señaló.

El jefe vulcano dio a conocer que, además del decomiso de 820 kilos de detonantes dentro de un negocio de la central de abasto Pifsal, en la primera semana de diciembre pasado, en este mismo punto de venta incautaron al menos 150 kilos de luces de bengala, así como 28 kilos 409 gramos de material explosivo.

Agregó que a la estación de Bomberos y Protección Civil, recientemente llegó una señora con una bolsa de plástico, que contenía un kilogramo de pirotecnia, aproximadamente, misma que encontró debajo de la cama de su hijo.

García Ávila puntualizó que la mayoría de los comerciantes informales a los que les decomisaron pirotecnia provienen de Estado de México y adujeron contar con un permiso federal para vender hasta 10 kilogramos: “Están engañados porque la Ley permite comprar, más no comercializar ni transportar”.