A más de dos años de que vecinos de la colonia Francisco I. Madero solicitaron la intervención en un terreno baldío ubicado en la calle Pino Suárez, entre Lucerna y 20 de Noviembre, convertido en basurero y refugio de vándalos, en el que han encontrado desde carteras y bolsas de mano vacías hasta ropa interior, no han obtenido solución por parte del gobierno de Tulancingo.
El alcalde Fernando Pérez Rodríguez señaló que el ayuntamiento no puede intervenir en los predios abandonados porque es invasión a propiedad privada.
Pidió a los habitantes que ayuden al municipio a ubicar a los propietarios de los predios para recordarles que están obligados a mantenerlos limpios y bardados.
El edil dijo que hay más terrenos abandonados en Napateco, Rincones de la Hacienda, La Escondida y El Refugio.
María Antonieta Islas
Tulancingo