Que quien no sabe cómo ganarse a su nuevo jefe es Christian Herón Guevara Gálvez, subsecretario de la Política Pública, ya que durante una audiencia pública le faltó al respeto a su compañera, la también subsecretaria Grisel Ubilla. Por lo pronto, se dice en los corrillos políticos, el exfuncionario de Desarrollo Social federal ya se hizo del rechazo de sus subordinados, pues ha amenazado con despedirlos si no le siguen la corriente.

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Que luego de que el diputado Víctor Guerrero Trejo se negó a apoyar la iniciativa de los legisladores afines a Grupo Universidad para que Morena retenga por dos años más la Junta de Gobierno del Congreso local, la congresista Roxana Montealegre Salvador se desquitó y afirmó que el dictamen para despenalizar el aborto no será votado este jueves. La expanista no se da cuenta que con su actitud revanchista lo único que hace es afectar al sector femenino, el cual forma parte de la sociedad que dice representar.

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Que fueron seis horas las que diputados y consejeros de Morena tuvieron una encerrona para dirimir que romperán el acuerdo del 15 de octubre de 2018 en el que pactaron con el PRI que les cedería el primer año de la presidencia de la Junta de Gobierno. Eso sí, la reunión se llevó a cabo en el restaurante Mirage, cercano a la sede legislativa, donde se hicieron consentir con bebidas y bocadillos de todo tipo. ¿Será que se consolide la votación?

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Que un eterno priista, hoy convertido en panalista en Huejutla de Reyes, Juan Carlos Fernández Carrillo, hijo de Juan Fernández Rojas, exfuncionario estatal y expresidente del comité municipal del PRI, se sumó al proyecto turquesa. Fernández Carrillo es señalado debido a su falta de responsabilidad y por ser tolerado y apoyado por la influencia de su padre.

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Que quien no para de dar mala nota es el diputado federal Gerardo Fernández Noroña, cuyo equipo amenazó a un medio local en Tepeji del Río, quien llegó a trabajar y se topó con la noticia de que si no se retiraba del lugar incendiarían su medio de transporte. Esto quedó grabado, por lo cual será difícil que el rijoso legislador lo niegue.