A Kevin Alexander lo atacaron mientras dormía a las afueras del Museo de Arte Popular, en el Centro Histórico.
El menor, de 13 años, vive en la calle y pernocta en esa zona de la Ciudad desde hace al menos 3.
Estaba acostado sobre una escalinata aledaña a una jardinera, en la esquina de Revillagigedo e Independencia.
Alrededor de las 9:00 horas, sintió que alguien lo destapó y le enterró algo en el glúteo derecho.
Enseguida observó alejarse a tres sujetos que también viven en condición de calle.
La molestia agudizó enseguida y sospechó que le habían disparado con un arma de fuego.
Luego se incorporó y caminó unos 20 metros hasta llegar a una sucursal de Oxxo, donde halló a un agente preventivo del Sector Alameda y le pidió ayuda.
Minutos después llegaron más policías en patrullas y paramédicos del ERUM en bicicleta.
Los socorristas revisaron la herida, le realizaron una curación y descartaron un impacto de bala.
En realidad, aseguraron, se trataba de una laceración que pudo ser provocada por algún objeto caliente o con fuego.
También llegaron amigos y conocidos de Kevin, quienes iniciaron una cooperación para comprarle gasas y líquidos desinfectantes para mantener limpia su lesión.
A ellos les dijo que reconoció a uno de los agresores y que se reunía con otros individuos cerca del Metro Hidalgo.
Una vendedora de periódicos señaló que también observó a los sospechosos cuando corrían hacia Avenida Balderas y que en las últimas semanas han ocurrido varías riñas entre los indigentes de la zona.
Elthon García | Agencia Reforma
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