Pese a que en el Congreso de la Unión está detenida la discusión sobre la disminución de la jornada laboral semanal de 48 a 40 horas, aún persisten las inquietudes dentro de la clase trabajadora respecto a los salarios, pero hay un elemento legal que impediría que los patrones recorten esta prestación de ley.

La propuesta de la reforma a la Ley Federal del Trabajo contempla dos días de descanso por cada cinco laborables; sin embargo, existen personas que han expresado sus dudas sobre si los salarios también resultarían afectados con este cambio constitucional.

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Ante esto, existe un apartado dentro de dicha legislación, en la que se indica que los empleadores solo pueden reducir la remuneración a un trabajador solo si este acepta, por lo que el hecho de que se recorte el número de horas laborales no afectaría en lo absoluto al pago de una persona que presta sus servicios en un centro de trabajo.

Por otro lado, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) emitió la recomendación 116, en la que se insta a que se haga la reducción de la jornada laboral de manera gradual y sin afectar el salario de las personas trabajadoras.

Redacción web