Un escalofriante caso de maltrato a perros ha conmocionado a la comunidad de la colonia Jorge Jiménez Cantú, en Tlalnepantla. Un hombre de 82 años de edad, identificado como Antonio “N”, fue detenido por las autoridades de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México tras un inquietante descubrimiento en su domicilio.
La Fiscalía Especializada de Delitos Cometidos por Fraccionadores y Contra el Ambiente del Grupo Tlalnepantla llevó a cabo un cateo en la vivienda de Antonio “N” ubicada en la calle Cerro de la Silla y Pirules, en el paraje conocido como Caracoles. Durante el operativo, los agentes se encontraron con escenas horripilantes: restos de perros y un machete en la mano del sospechoso, quien discutía con una mujer en ese momento.
El macabro hallazgo incluyó evidencia de que Antonio “N” capturaba perros callejeros, los mataba y luego los preparaba como carne asada para su consumo personal. Las autoridades encontraron al menos cuatro cadáveres de perros, uno de ellos recién destazado, en el interior de la casa.
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Mataba perros
La denuncia que llevó a la detención de Antonio “N” fue presentada por la asociación protectora de animales “Mundo Patitas” el 5 de septiembre anterior. Según el comunicado de la organización, el hombre además de cometer estos atroces actos, acosaba a mujeres, arrojaba orina y agredía a sus vecinos.
Vecinos del área relataron que el adulto mayor recogía a los perros por las noches, los llevaba a su domicilio y los sometía a un espeluznante ritual de desmembramiento, incluso mientras los animales aún estaban vivos, causando sus desgarradores gritos de agonía.
La asociación Mundo Patitas se convirtió en un eslabón crucial en este caso al recibir informes de los vecinos y presentar una denuncia formal por maltrato animal. La acción de la asociación llevó a la realización del cateo que permitió a las autoridades detener al presunto agresor de los perros y remitirlo al Penal de Barrientos.
Aunque se desconoce la cantidad exacta de perros que Antonio “N” habría matado, la presencia de los restos de al menos cuatro de ellos en su domicilio ha sido suficiente evidencia para iniciar un procedimiento penal en su contra por maltrato animal.
Las autoridades continuarán investigando este perturbador caso mientras la comunidad local se recupera del horror que ha causado la revelación de estas actividades inhumanas en su vecindario.
